lunes, 29 de julio de 2013

LOS BENEFICIOS DEL TÉ



Es una de las infusiones más consumidas en el mundo, pero no solo conquista por su sabor y aroma. El té también tiene múltiples beneficios para la salud. Conoce aquí cuáles son.

EN LA PREVENCIÓN DEL ALZHEIMER
Gracias a sus antioxidantes, el té verde es capaz de interrumpir un paso clave en el desarrollo del alzheimer, según encontró un estudio realizado por la Universidad de Leeds, en Inglaterra.

CONTRA LA DIABETES
Al favorecer la ingestión y la absorción de la glucosa, beber té frecuentemente reduce en un 20% la posibilidad de desarrollar diabetes tipo 2, encontró una investigación llevada a cabo por la Universidad Heinrich-Heine, en Alemania.

REDUCE EL ESTRÉS
¿Sufres de estrés? El té negro podría ser lo que necesitabas para relajarte. Esta bebida es capaz de disminuir los niveles de estrés, afirma el portal Huffington Post. Asimismo, ingerirlo de forma frecuente por unos 6 meses ayudaría a reducir la presión sanguínea. Por otro lado, el té verde podría combatir la depresión.

FUENTE DE JUVENTUD
El llamado té blanco, una variedad producida especialmente en China, es rico en polifenoles y según un estudio, al ser una gran fuente de antioxidantes podría reducir la aparición de arrugas al favorecer la producción de colágeno y la elasticidad de la piel.

PARA MANTENER UN PESO SALUDABLE
Aquí uno de los beneficios más célebres del té verde: su asociación con la reducción de peso. ¿La razón? Ayuda a la oxidación de la grasa.

Fuente: El Comercio

FRÍO QUEMA GRASA CORPORAL



De acuerdo con un nuevo estudio de la Escuela de Medicina de Harvard, la exposición a bajas temperaturas ayuda al cuerpo a eliminar calorías de forma natural, pero, ¿cómo el frío quema grasa corporal?

En la investigación publicada por Proceedings of the National Academy of Sciences of the United States of America (PNAS) se detalla que al descender la temperatura en el cuerpo, las células encargadas de almacenar la grasa blanca y parda liberan su energía en forma de calor, lo que permite eliminar las calorías.
Bruce M. Spiegelman, autor del estudio, señala que cuando el cuerpo siente frío, las células duplican sus niveles de una proteína denominada UCP1, que es la encargada de activar el sistema de termogénesis (desprendimiento de calor y energía) para quemar sus reservas (grasa).

Algunos investigadores aseguran que para activar las células de grasa parda, las neuronas sensoriales que se encuentran en todo el cuerpo le avisan al cerebro del descenso de temperatura, por lo que produce norepinefrina, una sustancia química del sistema nervioso simpático, que moviliza al cuerpo para afrontar cualquier situación.

No obstante, en este estudio se detalla que no se necesita de la orden del cerebro, porque la actividad termogénica puede reaccionar de forma independiente.

A pesar de que esta investigación podría ser una buena alternativa para disminuir la obesidad y enfermedades relacionadas como la diabetes, lo ideal es mantener una dieta balanceada y la práctica de algún ejercicio. Y tú, ¿cómo quemas grasa para mantener una figura delgada?

5 EJERCICIOS CONTRA LA FLACIDEZ


La flacidez, en general de todo nuestro cuerpo incluyendo el rostro, es producida por la pérdida o deterioro de las fibras de colágeno y elastina en la piel, ocasionada por la falta de definición muscular, aumento de peso o cambios hormonales propios de la edad. La solución radica principalmente en los ejercicios contra la flacidez.
Los ejercicios contra la flacidez previenen y reducen la pérdida del tono muscular del cuerpo y rostro, además de que te permiten fortalecer y tonificar grupos musculares del abdomen, glúteos, piernas y brazos, que son los más afectados por la flacidez. Por ello, te presentamos algunos ejercicios contra la flacidez, según es.fitness.com



1. Abdomen. Un ejercicio efectivo contra la flacidez es el plank, ya que promueve la congestión muscular y fortalecimiento de todo el grupo muscular del abdomen. Recuéstate boca abajo sobre el suelo y levanta tu propio peso apoyándote en los codos y pies. Mantén la espalda recta a la vez que contraes el abdomen. Conserva la presión y posición por 15 segundos. El ejercicio se debe repetir entre 10 a 50 veces.

2. Glúteos. Los desplantes son ejercicios de resistencia que permiten trabajar los músculos cuádriceps y los glúteos. Párate de manera recta con los brazos a los costados. Adelanta una de tus piernas y avanza el resto del torso, deteniéndolo al flexionar la pierna adelantada. Regresa a la misma posición y cambia de piernas. Realizar 3 series de 10 desplantes cada una.

3. Piernas. Para deshacerte de la flacidez y exceso de grasa acumulada en los muslos, se recomienda realizar bicicleta. Trata de intercalar un pedaleo suave (cinco minutos) con uno fuerte (30 segundos), con descansos de 30 segundos entre cada uno. Luego toma 3 minutos para volver a tu ritmo y comenzar de nuevo. Comienza con 10 minutos e incrementa tus tiempos.
4. Brazos. Las elevaciones son ejercicios que te permiten fortalecer y reducir la flacidez de tus bíceps y tríceps, así como el temido gordito que cuelga. Pero además, tonifica tu pecho y hombros. De pie, haz elevaciones con ambos brazos sin que tus manos rebasen la altura de los hombros. Realiza los movimientos lentamente para evitar lesiones y apóyate empleando mayor peso o mancuernas. Haz 30 repeticiones.

5. Rostro. Abre completamente la boca, nariz y ojos (como si estuvieras bostezando) y mantén esa expresión durante cinco segundos; relaja durante otros cinco segundos y repite el ciclo un total de cinco veces. Esto favorecerá el trabajo de los músculos faciales para combatir la flacidez. 
Además de practicar estos ejercicios contra la flacidez, también se recomienda seguir una dieta rica en fibra, carbohidratos como cereales, frutas, verduras y granos, beber 2 litros de agua cada día, así como aplicarse algunos masajes con cremas naturales reafirmantes para prevenir la pérdida de colágeno y elastina de la piel.

lunes, 22 de julio de 2013

10 CONSEJOS PARA REDUCIR LA PAPADA



A partir de los 30 años, los músculos de la mandíbula empiezan a perder tensión, favoreciendo el desarrollo de la papada o doble mentón y la pérdida de definición del óvalo facial.
Por ello, si deseas prevenirla o reducirla, te ofrecemos estos consejos que te ayudarán tonificar los músculos del cuello y la cara:

Ejercicios vs papada

1. Traza con la lengua, sobre el paladar superior, círculos en el sentido de las agujas del reloj mientras la espalda se mantiene recta y la boca cerrada. Realiza 10 repeticiones, 3 veces por día.

2. Pronuncia de manera marcada, abriendo mucho la boca, las cinco vocales. Repítelas 10 veces.

3. Con la espalda recta y cruzada de brazos, estira el cuello hacia adelante y gira lentamente la cabeza a la derecha. Mantén la posición por dos segundos y vuelve a la inicial, para después girar el cuello hacia la izquierda.  Haz 10 veces de cada lado.

4. Hacer una sonrisa invertida intentando tensar al máximo los músculos del cuello, y repetirlo unas 10 veces.

5. Para realizar en cualquier momento del día, puedes recurrir a una goma de mascar que te hará trabajar los músculos del cuello y la cara cuando masticas.
Alimentación vs papada

La acumulación de grasa en el cuello puede deberse a una mala alimentación y a la retención de líquidos. Excluye de tu dieta las grasas saturadas, azúcares refinados y bebe, como mínimo, litro y medio de agua.

1. La hidratación de la piel es muy importante. Aplica una crema hidratante en el cuello para combatir su flacidez o con efecto tensor.

2. Usa protección solar para evitar que la piel envejezca, pierda elasticidad y se acentúe la papada. Recuerda que la crema se aplica siempre de arriba abajo y suavemente, sin desplazar la piel.

3. Además de comer a diario frutas y verduras frescas, es muy importante darle prioridad al pescado frente a la carne.

4. Elije lácteos y sus derivados que sean descremados.



5. Aumenta tu consumo de fibra (arroz, pasta y legumbres)
Un último consejo de belleza: aplica un chorro a presión de agua fría sobre la zona del cuello, y un posterior masaje suave con una esponja vegetal. ¡Dile adiós a la papada!

ESTRÉS CAUSA DOLOR EN TUS OÍDOS



El estrés es sólo una respuesta al mecanismo de defensa que tiene el cuerpo ante situaciones que generan mucha tensión y ansiedad. La manifestación más clara en una persona son: padecimientos cardiacos, dolores de cabeza, gastritis, colitis, ulceras y malestares en el oído.

El estrés es un estado de gran tensión nerviosa produce dolor muscular que involucra, de manera directa, a los músculos de masticación y el cuello; es decir, genera rigidez en la nuca y cara. Tener estrés produce daño en el oído como zumbidos y dolor en esta zona del cuerpo.

Al respecto el médico David Núñez, miembro de la Federación Mexicana de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (FESORMEX), comenta: “El estrés incrementa los malestares en la cabeza, cuello y espalda que conectan en el sistema masticatorio y el oído. Las estadísticas demuestran que es por la excesiva presión que se ejerce en los dientes y mandíbula durante la noche".

Ante tal situación, Núñez hizo un llamado a la población para que puedan disminuir el estrés y da las siguientes recomendaciones:
 1. Controla emociones perjudiciales para tu salud como el  miedo, ira, enojo, ansiedad y depresión
2. Evita comer hielo y morder tus labios
3. No consumas chicles, caramelos y/o cacahuates

El mejor tratamiento para quitar las molestias del oído por estrés, es acudir al médico especialista en otorrinolaringología. En algunos casos, el problema se resuelve sólo con un antiinflamatorio y/o relajante muscular, en otros es necesario contar con una terapia física.

REMEDIOS CASEROS PARA LAS VÁRICES


Las várices no son más que venas inflamadas que aparecen en la superficie de la piel. Aunque pueden verse en cualquier zona del cuerpo, es frecuente que salgan en las piernas y sus causas más comunes se relacionan con la falta de ejercicio, el sobrepeso, el embarazo o por permanecer demasiadas horas de pie.
Las venas comienzan a funcionar mal debido a obstrucciones o a la gran presión a la cual están expuestas. Si no es debidamente tratado, dicho trastorno puede conducir a malestares diversos tales como: dolores, calambres, sudoraciones y fatigas. Veamos algunos remedios caseros para las várices, que estamos seguros serán muy útiles para quienes padecen de este problema.

¿Cómo tratar las varices en casa?

Dieta
Lo primero que hay que controlar cuando se padece de várices es la dieta habitual. Para empezar debemos establecer un menú balanceado que incluya pescado y muchas frutas y vegetales, al tiempo que se reducen al mínimo los carbohidratos, los alimentos con alto contenido de azúcar y grasa, las bebidas alcohólicas, la comida chatarra y los productos procesados. Las bayas como las moras y las cerezas, el jengibre, la cebolla, el ajo y la piña, son remedios excelentes dentro de la dieta pues contienen compuestos que previenen la aparición de várices y alivian sus síntomas. Añádelos al menú.

Jugos naturales
Una de las mejores maneras de tratar las várices es mantener el cuerpo debidamente hidratado. Los jugos naturales son muy recomendados en estos casos, sobre todo los de espinaca y zanahoria, pues también nutren el organismo. Se deben consumir 200 ml. del primero y 300 ml. del segundo al mismo tiempo. Procura también beber muchos jugos de frutas frescas.

Vitaminas
Las vitaminas son importantes para cualquier problema del organismo. Especialmente las vitaminas E y A son aconsejables si de curar várices se trata. Puedes tomar suplementos vitamínicos ricos en dichos compuestos. Al mismo tiempo, aplica por unos minutos aceite de vitamina E con corteza de avellano o de roble en las áreas afectadas. Luego enjuaga con abundante agua.

Peso corporal
Si eres una persona gruesa u obesa, trata de perder peso corporal. Lo ideal es que hagas ejercicios diariamente. Caminar, nadar, montar bicicleta, correr son las más adecuadas pues favorecen la circulación del cuerpo.


Piernas
Trata de mantener las piernas en alto durante mucho tiempo. Tomate recesos de media hora y pon tus pies a un nivel por encima del corazón pues produce una mayor efectividad. Mientras más veces al día realices este remedio, mayores serán los resultados. Si te sientas a ver la TV o te pones a leer aprovecha y repite esta operación.
Estos son algunos de los remedios caseros para las várices más efectivos que hay. En su mayoría dependen de ti y no son difíciles de realizar. Pon manos a la tarea y verás que poco a poco tus venas se van relajando y, si no desaparecen del todo las inflamaciones, al menos notarás un gran alivio de tan desagradables síntomas.

martes, 16 de julio de 2013

MASCARILLAS PARA LA PIEL



No te debes resignarte en la lucha contra las espinillas, puntos negros, granitos y demás imperfecciones de la piel. ¡Puedes ganarles! Y no necesariamente con tratamientos costosos y prolongados, sino con recetas caseras y naturales que, además de ser económicas, mejoran notoriamente la piel sin ponerla en riesgo.
Abre tu cuaderno de apuntes de trucos de belleza y anota estas diferentes mascarillas caseras para las espinillas.

Mascarilla de miel, nuez moscada y canela
Esta mascarilla nutre, hidrata y exfolia la piel. La miel tiene propiedades humectantes y antibacterianas, mientras que la nueza moscada actúa como antiinflamatoria y la canela como un exfoliante natural. La combinación de estos productos de belleza naturales en una mascarilla es excelente para combatir los puntos negros y lograr una limpieza de cutis en profundidad.
Ingredientes:
1 cucharadita de miel
1 cucharadita de nuez moscada en polvo
1 cucharadita de canela en polvo
Preparación:
Mezcla los ingredientes en una taza, hasta formar una mezcla de color chocolate. Pon una toalla alrededor de tu cuello -para evitar manchar tu ropa- y aplica la máscara en tu rostro.
Déjala actuar por 30 minutos, manteniendo la toalla, ya que puede escurrir la mezcla. Si tienes picazón o molestias en la cara, debes lavarte y retirar la mezcla rápidamente. Después de los 30 minutos lávate la cara con agua tibia suavemente.
Seca tu rostro dando palmaditas con una toalla suave y aplica crema hidratante si lo deseas. Repite el proceso dos veces por semana.

Mascarilla de manzanilla
Seguro sabías que la manzanilla sirve para aclarar el cabello naturalmente. OK, bueno, ahora conoces otro truco más: tiene propiedades desinfectantes y antiinflamatorias que nos ayudan a la salud y belleza de la piel.
Ingredientes:
1 bolsa de té de manzanilla
1 taza de agua
¼ de taza de avena
2 gotas de aceite de oliva
2 cucharadas de miel natural
½ cucharadita de canela
½ cucharadita de nuez moscada
Preparación:
Prepara una taza de té de manzanilla y déjala enfriar. Pon ¼ de taza de avena en una licuadora y enciéndela hasta que se forme un polvo. En un recipiente pon ¼ de taza de té de manzanilla y añádele la avena.
Agrega dos gotas de aceite de oliva, dos cucharadas de miel, ½ cucharadita de canela y ½ cucharadita de nuez moscada. Revuelve. Si tu piel es muy sensible, no agregues canela ni nuez moscada, ya que son un poco irritantes.
Para aplicar la máscara debes tener la cara recién lavada y seca. Masajea suavemente la máscara en tu rostro y déjala actuar por 15 minutos. Luego enjuaga con agua tibia y ya tendrás tu rostro con menos espinillas.
Puedes usar esta mascarilla todos los días.

Mascarillas para piel grasa

La piel grasa tiende a ser la que más sufre de espinillas. Debido a la producción excesiva de sebo que caracteriza a las pieles grasas, se tapan los poros y así aparecen los odiosos puntos negros o espinillas. De esta forma, con las siguientes recetas podrás eliminar la grasitud de la piel que causa la acumulación de espinillas.
Mezcla una cucharadita de levadura de cerveza, con 1/3 de taza de yogur natural, hasta formar una pasta que puedas aplicar en tu cara y dejar actuar por 15 minutos. Luego enjuaga.
Mezcla dos claras de huevo con una cucharadita de jugo de limón, hasta que quede esponjoso. Aplícala en la cara por 10 a 20 minutos y enjuaga.
Mezcla 1 cucharada de jugo de limón con 2 claras de huevo, 3 cucharaditas de miel y 1 taza de fresas en una licuadora. Deja actuar la mezcla en tu rostro por 10 minutos y enjuaga con agua tibia. Aplica dos veces a la semana estas mascarillas y verás cómo mejora tu piel.
Como ves, puedes elegir entre varias mascarillas faciales naturales que puedes hacer con elementos que están en tu casa, por lo que sólo debes darte el tiempo y la paciencia para hacerlas y ver cómo tu cutis va cambiando.

¿CONOCES LOS BENEFICIOS DEL YOGUR?



Hay un alimento fantástico que aporta millones de bacterias: El Yogur. El yogur clásico se compone de varios tipos de lactobacilos, pero actualmente hay marcas que comercializan lácteos con las variedades acidófilo y bífido, entre otros. Todos ellos, incluso los yogures clásicos, son muy beneficiosos para la salud.

En Grecia y Turquía, el yogur tiene muchos usos: como bebida en su forma salada, como condimento, para aliñar las verduras, como postre o merienda, etc. De ahí que se atribuya a él que los habitantes de estas zonas vivan tantos años. El pariente próximo del yogur, el kéfir, es igualmente interesante para la salud y aún más digestivo que aquel. Ambos se pueden elaborar en casa fácilmente.

Los lactobacilos también pueden ser interesantes para mantener la flora de otra mucosa bastante vulnerable, la vaginal. Irrigaciones con yogur ayudan a mantener el pH conveniente para que proliferen los organismos adecuados, además de facilitar la lucha contra la Candida albicans vaginal y contra las bacterias del colon de las infecciones urinarias.
Destaca su capacidad de disminuir el riesgo de encefalopatía hepática en casos de enfermedades avanzadas del hígado, y que tiene lugar por la intoxicación neurológica a causa de determinados gases. 

Los lactobacilos son capaces de disminuir los niveles de amonio, nitrógeno y fenol en el intestino, tóxicos que, si además existe estreñimiento y permanecen más tiempo en el organismo, pueden llegar a provocar la encefalopatía.
En general, sin necesidad de estar enfermos, es conveniente que aportemos a nuestro organismo gérmenes nuevos cada poco tiempo, ya sea en forma de yogur o kéfir. Este aporte será especialmente importante si acostumbramos a comer carne, ya que ese alimento facilita la proliferación de flora de putrefacción, en lugar de flora de fermentación, que procede de la comida de origen vegetal. Y será obligado si hemos seguido un tratamiento con antibióticos: se recomienda mantener la terapia de repoblación durante al menos dos o tres semanas después de haber dejado de tomar medicamentos.

Composición del Yogur natural
Por 100 g de porción comestible:
82 Calorías
5 g de Proteínas
1 g de lípidos
14 g de Hidratos de carbono
7 mg de Colesterol
0,6 g de Ácidos grasos saturados
0,32 g de Ácidos grasos monoinsaturados
0,03 g de Ácidos grasos poliinsaturados
180 mg de Calcio
0,1 mg de Hierro
17 mg de Magnesio
0,6 mg de Cinc
76 mg de Sodio
240 mg de potasio
11 mcg Vitamina A
0,05 mg Vitamina B1
0,26 mg Vitamina B2
1,2 mg Vitamina B3
0,04 mcg Vitamina B6
2 mcg Vitamina B9
0,4 mg Vitamina C
0,03 mg Vitamina E


Nota. Podemos consumir el yogurt de muchísimas maneras, por ejemplo: de postre solo, con frutas, en bizcochos, tartas, salsas, cremas, etc.

miércoles, 10 de julio de 2013

¿QUÉ ES EL MAL DEL PUERCO?


Típica escena de oficina: comiste riquísimo, y después de la entremesa con tus compañeros, regresas a trabajar a tu lugar. De pronto, como por arte de magia, te da tanto sueño que sientes que en cualquier momento te quedarás dormida sobre el teclado, ¿te ha pasado?

Esta sensación de sueño crónico después de comer, sobre todo cuando comes pesado, es normal, y la causa de que ocurra es el proceso de digestión. A pesar de que su nombre médico es somnolencia post prandial, la mayoría de las personas conocen a este fenómeno con otro nombre menos especializado: el mal del puerco.

¿Por qué ocurre?
De acuerdo con la Dra. Karla Guzmán Ruddoff, este fenómeno se da porque al terminar de comer, la mayor parte de la sangre circulante se dirige hacia la "circulación mesentérica", es decir, a los vasos que irrigan al estómago e intestinos para poder ayudarles a llevar a cabo la degradación de los alimentos y la absorción de sus nutrientes.

Cuando comes mucha azúcar y/o carbohidratos

"Te da sueño porque el flujo de sangre disminuye un poco en el cerebro. Ahora, si a esto le agregas que ingeriste alimentos altos en azúcar o en carbohidratos, estos harán que tu glucosa aumente y a su vez también aumentará en tu cuerpo un aminoácido llamado triptófano, el cual se convierte en melatonina, la cual es un inductor al sueño.", asegura la especialista.

¿Y cuándo comes mucha grasa?
De acuerdo con la Dra., con las grasas ocurre un proceso diferente, pero que deriva en el mismo resultado de tener mucho sueño. Resulta que cuando ingieres alimentos demasiado grasosos, tu cuerpo, como reacción, comienza a producir más una hormona llamada colecistocinina, cuya responsabilidad es ayudar a la degradación de la grasa.

Recomendaciones antisueño
La primera recomendación para evitar la somnolencia postprandial es, obviamente, evitar alimentos ricos en grasas, azúcares y carbohidratos. Entre más pesados sean, más sueño te dará.

De acuerdo con el sitio Remediospopulares.com, si hemos comido pesado y queremos evitar el sueño, una buena opción es preparar un té de cilantro, por las propiedades que tiene esta planta que favorecen la digestión y la evacuación de grasas del organismo.

¿QUÉ ES MEJOR CUANDO NOS ENFERMAMOS: DESCANSAR O SEGUIR HACIENDO EJERCICIO?


El cuerpo nos envía señales cuando estamos enfermos o adoloridos. Debemos aprender a interpretarlas para saber cuándo darle un descanso para que se recupere. A continuación encontrarás algunas claves que pueden orientarte la próxima vez que te sientas mal y no sepas si debes ir al gimnasio o quedarte en casa haciendo reposo.

Hacer ejercicio regularmente tiene muchos beneficios para tu salud, por ejemplo, es bueno para el corazón, la memoria, el fortalecimiento de músculos y los huesos, la reducción del estrés y la ansiedad y hasta mejora tu sistema inmunológico (de defensas), lo que disminuye tu riesgo de que contraigas enfermedades como la gripe y el resfriado.

Pero ¿qué ocurre cuando un virus entra en tu cuerpo y te enfermas? Sandra no quería perderse un maratón benéfico que tanto había esperado y decidió correr a pesar de que tenía un dolor de garganta y una fiebre baja. El resultado: al día siguiente su malestar era aún peor y tuvo que quedarse en cama más tiempo del que tenía previsto.
Martin, en cambio, estaba tan preocupado por marcar sus abdominales antes de sus vacaciones, que tampoco le hizo caso a esa congestión en el pecho que lo tenía tan mal. 

¿Qué le ocurrió? Durante su entrenamiento le dio un ataque de tos tan fuerte que tuvo que abandonarlo a la mitad y se fue directo al médico. Además, unos días después se enteró que su compañero de rutina había empezado a sentir el mismo malestar que él tenía unos días atrás, cuando fue al gimnasio sin escuchar las señales que le enviaba su cuerpo.
Entonces, ¿qué es más conveniente cuando nos enfermamos? ¿Cómo puedes saber cuándo hay que dejar de hacer ejercicios para reponerte? La clave está en aprender a reconocer las señales que te envía tu cuerpo y respetarlas.

Cuando tus síntomas son ligeros y te sientes bien ejercitando, continúa. Pero si te sientes mal a medida que practicas la actividad física, baja el ritmo o simplemente para y vete a descansar. Además, piensa que si tus síntomas son fuertes y no tienes ni ánimo de levantarte para ir a la escuela o el trabajo, menos ánimo vas a tener para salir a trotar o a montar bicicleta. En ese caso tu cuerpo te está pidiendo reposo y una buena alimentación para recuperar las energías.

Por ejemplo, no hay problema si haces ejercicio cuando tus síntomas son leves y tolerables como: un dolor de garganta leve, estornudos y nariz que gotea o está congestionada y los síntomas son ligeros y no hay fiebre. En cambio, no es conveniente que hagas ejercicio cuando tus síntomas son más fuertes e incluyen: congestión de pecho, tos, malestar estomacal, dolor de músculos, fatiga y fiebre. Especialmente, nadie con fiebre debe de ejercitarse.  Si lo haces -como Sandra-, corres el riesgo de deshidratarte.

Otro dato que debes tener en cuenta es que los virus y los lugares cerrados no son buenos aliados. Por eso, si vas al gimnasio y tienes un virus o una infección, puedes transmitírsela  fácilmente a tus compañeros (esto también puede ocurrir en tu oficina o lugar de trabajo, por eso también es importante que te tomes los días necesarios para recuperarte).

En estos casos, la recomendación es que, a medida que te vayas sintiendo mejor, comiences poco a poco a practicar alguna actividad suave al aire libre, como caminar o andar en bicicleta. De ese modo no le estarás exigiendo más a tu cuerpo de lo que deberías, ni poniendo en riesgo a tus compañeros. Y si el clima no te permite hacer ejercicio al aire libre, puedes hacerlo en casa, aun sin equipos especiales: puedes subir y bajar escaleras, trotar en el sitio o hacer abdominales y flexiones.

Otra situación importante en la cual debes aprender a escuchar e interpretar las señales que te envía tu cuerpo es frente al dolor, sobre todo cuando recién comienzas una nueva actividad física o cuando cambias tu rutina.

Muchas veces, los dolores son propios del ejercicio y se van así como vinieron.  Es lo que se conoce como “dolor sano”.  Por el contrario, hay veces en que el dolor indica que tienes una lesión que hasta puede necesitar el tratamiento adecuado para sanar.

En el primer caso, las molestias no aparecen mientras haces el ejercicio sino uno o dos días después, y si comienzas a hacer ejercicio cuando tienes “dolor sano”, éste desaparecerá luego de 10 o 15 minutos de ejercitar. Por otro lado, si el dolor continúa y hasta empeora mientras haces ejercicio, es importante que lo suspendas ya que posiblemente se trate de una lesión, que incluso puede estar acompañada de inflamación (hinchazón) y enrojecimiento de la piel.

Del mismo modo, el dolor en las articulaciones rara vez tiene que ver con los músculos. Es importante que consultes a un médico si te duelen las rodillas, los tobillos, las muñecas o los codos. Y si sientes entumecimiento u hormigueo en alguna parte, tampoco lo dejes pasar, ya que ese tipo de sensaciones suelen estar relacionadas con una compresión de los nervios, lo cual indica que podrías tener una lesión.
Préstale atención a tu cuerpo. Si aprendes a distinguir las señales que te envía podrás detenerte cuando sea necesario y atender cualquier lesión rápidamente para poder regresar lo antes posible a tu rutina de ejercicios y mantener el estilo de vida sano que has elegido.

EL EJERCICIO: UNA BUENA FORMA DE EMPEZAR EL DÍA



¿Eres de los que se despierta con energía y listo para entrar en acción? Si es así, una buena idea es agregar una rutina de ejercicios al levantarte, y aquí te contamos cómo hacerlo. Si por el contrario eres de los que necesita más tiempo para dejar las sábanas, no dejes que esa sea tu excusa para no hacer ejercicio. Puede que te cueste un poco tomar la iniciativa, pero un poco de actividad puede animarte y darte más energía para enfrentar el día que se inicia. ¡No es tan difícil! Sigue leyendo y descubre cómo empezar.

¿Te preguntas por qué harías ejercicios al despertar si en verdad lo que más quisieras es seguir durmiendo? El descansar bien es importante para mantener una buena salud, pero igualmente lo es la actividad física, y comenzar tu día con ejercicios. Te ayuda a estirar los músculos y te brinda una explosión de energía y buen humor, que luego te acompañarán durante toda la jornada.

La buena noticia es que no necesitas ir corriendo al gimnasio ni hacer un gran esfuerzo físico para lograrlo. Lo que se recomienda es que establezcas una rutina en la cual combines distintos tipos de ejercicios, y que los hagas poco a poco y con tranquilidad. Esto es suficiente para empezar.

Una alternativa que siempre es bienvenida son las caminatas: no necesitas ni equipo ni grandes inversiones, sólo un calzado cómodo y elegir el lugar adónde irás, que puede ser muy cerca de tu hogar. Incluso, si tienes una mascota, posiblemente encuentres en ella una compañera ideal para salir a recorrer unas cuadras antes de prepararte para ir al trabajo.

Muchas personas minimizan las caminatas o no las consideran como un ejercicio. Sin embargo, es una actividad aeróbica que puede brindarte muchos beneficios: implica pocas posibilidades de lesiones, ayuda a estirar los músculos, es buena para el corazón y hasta hay estudios que afirman que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico (el sistema de defensas para combatir infecciones).

Claro que si vas a paso muy lento y te detienes a ver la oferta de cada negocio que se cruce ante tu vista, posiblemente no sea de mucha ayuda. Pero puedes convertir tus caminatas en verdaderas sesiones de ejercicio, que, cuando se realizan temprano en la mañana, te ayudan a despejar la mente y a estar mejor preparado(a) para comenzar tu día.

Otra alternativa suave que puede ayudarte a mantener la flexibilidad y a sentirte bien durante el día es el yoga. No importa si eres hombre o mujer. Tomar clases matinales de esta práctica oriental milenaria te ayuda a lubricar las articulaciones, así como a estirar y a tonificar los músculos, y prepara a tu cuerpo para una actividad aeróbica más vigorosa. Además, es bueno para combatir dolores crónicos, fomenta la capacidad de concentrarse y reduce el estrés.

Una vez que conozcas los movimientos y estés habituado a las posiciones del yoga, puedes practicarlo tú mismo en tu casa, ya sea sólo o con la ayuda de algún video instructivo.
Por último, añadir ejercicios de fuerza o resistencia puede ser una de las partes más beneficiosas de tu rutina de ejercicios matinal. En ese caso, puedes agregar algo de peso a tus movimientos en tu hogar, como levantar pesas o mancuernas, estirar una banda elástica que ejerza un poco de resistencia o incluso practicar poses de equilibrio que impliquen soportar y mantener tu propio peso corporal. Otra posibilidad es que te pongas un poco de peso en tus piernas o brazos mientras haces tu caminata diaria.
¿Todavía te parece que agregar ejercicios por la mañana es una misión imposible? 

Recuerda que debes empezar siempre poco a poco y no exigirte más de la cuenta, para evitar lesiones que puedan evitarse. Aprende a reconocer las señales que te envía tu cuerpo y agrega más intensidad paulatinamente, a medida que tu condición física vaya mejorando.

lunes, 8 de julio de 2013

ALIMENTACIÓN EN LOS ADOLESCENTES



En varias ocasiones hemos mencionado el tipo de alimentación que debemos llevar dependiendo de la edad que tengamos, hoy vamos a hablar un poco más sobre este tema. 

En especial nos centramos en el caso de los adolescentes, durante esta etapa puede que sea difícil comer bien, ya que suelen salir mucho y frecuentar lugares de comida rápida. Por eso, hoy vamos a hablar sobre la importancia de llevar una dieta equilibrada sin carencias de vitaminas y minerales, ¡esperamos te sea muy útil!

Debemos tener en cuenta que durante esta etapa de la vida la necesidad de nutrientes es mayor, ya que el cuerpo está en un período de crecimiento y necesita más calorías y nutrientes claves, incluyendo proteína, calcio, hierro, folato y zinc.

El hierro es uno de los minerales más importantes, al igual que el calcio, el mismo ayuda a transportar oxígeno a través de la sangre y a que el sistema inmunitario pueda combatir las enfermedades. Por tanto, elegir alimentos ricos en hierro ayuda a mantener el cuerpo funcionando de manera óptima.

En cuanto al calcio, el mismo es muy necesario porque el esqueleto se encuentra en crecimiento. Este es un momento crítico en donde es fundamental que se cumplan con las necesidades de este mineral, ya que, de otra forma puede traer consecuencias como, terminar con huesos más débiles que son más propensos a las fracturas. Además, debemos tener en cuenta que hay una ventana de tiempo limitado para depósito de calcio en el hueso, cuando superamos los veinte años, el calcio no se añade a los huesos.

Por tanto, resulta fundamental que nos preocupemos por ingerir las cantidades necesarias de estos nutrientes, nuestra salud futura depende de ello. Esta es la información que teníamos para darte, ¡esperamos te sea muy útil!

lunes, 1 de julio de 2013

CORRER EN LA CINTA



La cinta es uno de los aparatos más utilizados en las salas de musculación, esta nos permite desempeñar trabajo aeróbico y calentar los músculos antes de empezar a levantar pesos. Puede que parezca muy sencilla de utilizar, sin embargo, hay algunas consideraciones que es importante tener en cuenta al usarla, de forma que evitemos cometer algunos errores básicos, ¡presta mucha atención!

Lo primero a considerar es la indumentaria que llevamos, muchos piensan que como no saldrán a la calle y trotarán dentro de un lugar cerrado pueden descansar con la indumentaria que llevan, un grave error. Es fundamental que tengamos un calzado adecuado que absorba el impacto cuando caminamos o corremos. Además, la suela de la zapatillas debe estar preparada para superficies deslizantes, ya que la cinta del gimnasio puede resbalas y hacer que nos caigamos al practicar la carrera.


Por otro lado, en el caso de la ropa, es importante que empleemos materiales que mantengan la piel seca y aireada, es importante evitar que la humedad se acumule en nuestro cuerpo, ya que esto hará que la temperatura del mismo aumente.

Ahora queremos hablar sobre dos puntos importantes en los que se suelen cometer errores.
Vamos a comenzar hablando sobre la adaptación sobre la máquina, debemos tener en cuenta que el movimiento de la misma no es natural, solamente se asemeja al desplazamiento cuando corremos, por lo que puede ser difícil lograr el equilibrio. Por tanto, es importante que empieces siempre con velocidades cortas y vayas aumentando progresivamente.

El segundo punto del que queremos hablar es sobre la postura en la cinta, es importante mantener la vista al frente, esta es la postura más cómoda y menos problemática para nuestro cuerpo. A veces miramos hacia abajo para ver el aparato en reproducción lo cual puede ser problemático, este gesto si bien se ve inocente puede acabar lesionando nuestras cervicales si lo mantenemos por mucho tiempo.

Estos eran los consejos que teníamos para compartir, fáciles de seguir y marcan la diferencia a la hora de correr en una cinta, ¡te animamos a tenerlos en cuenta!