martes, 29 de octubre de 2013

CINCO EJERCICIOS CASEROS PARA ACABAR CON LA GRASA ABDOMINAL

¿Harta de que tu abdomen caiga en perfectos rollos? ¿Desesperada por una barriga chata, igual que la de las modelos? ¡Empieza a entrenar! Ejercicios intensos, en intervalos cortos, queman calorías más rápidamente y más grasas. Para muchas personas, esto se traduce en un millón de abdominales, pero hay otras cosas que puedes hacer para verte mejor. Te presentamos cinco ejercicios para practicar en casa.

Ejercicio 1: súbete a la bici fija
Empieza lentamente, para precalentar los músculos y evitar lesiones. Al cabo de unos minutos, comienza a pedalear a un 20% más de intensidad de la que estás habituada, durante 30 a 60 segundos. Disminuye la intensidad a un promedio que sea la mitad del ritmo al que normalmente entrenas. Alterna estos períodos cortos (de medio minuto a 1 minuto) de pedaleo fuerte con pedaleo suave, hasta completar 6 a 10 intervalos. Cuando sientas que el ejercicio ya no te demanda tanto esfuerzo, aumenta un poco más la intensidad y la duración del pedaleo fuerte, y acorta los períodos de descanso. Repite esta actividad tres o cuatro veces por semana para lograr abdominales (¡y piernas!) firmes.

Ejercicio 2: agita la escoba
Esta opción es muy simple y solo necesitas una escoba. El objetivo es sostenerla sobre tu cabeza y luego inclinarla hacia la derecha y hacia la izquierda. Deberías sentir el esfuerzo a los costados del abdomen, en los famosos “flotadores” laterales.

Ejercicio 3: abdominales y espinales
Los abdominales no te borrarán la grasa de la barriga, no te ilusiones. Pero sí fortalecerán tus músculos y harán que tu abdomen luzca mucho mejor. Practica dos tipos de ejercicios, en series: los abdominales convencionales y los contrarios. Para los últimos, acuéstate en el suelo boca arriba, y levanta las caderas y las piernas, para trabajar los músculos inferiores.

Ejercicio 4: rotación
Párate y separa los pies tanto o más que la línea de tus hombros. Abre los brazos hacia los costados y sostenlos al nivel de los hombros. Luego, rota tu cara, los brazos y tu torso, hacia la izquierda y hacia la derecha. Deja las piernas firmes en el lugar. Con este ejercicio, estarás trabajando los lumbares, los abdominales, los oblicuos, los muslos y los brazos.

Ejercicio 5: sumo
Otra opción, importada del sumo, para fortalecer tu abdomen y tus muslos. Párate con los pies separados a la altura de tus hombros y los dedos rotados unos 45 grados hacia afuera. Junta las manos detrás de la cabeza, sostén los codos a los costados, flexiona las rodillas e inclínate lateralmente hacia un lado y hacia el otro.
Recuerda que no debes someterte a ningún plan de ejercicios si antes consultar con tu médico o profesional de la salud.
Y tú, ¿qué otros tips caseros recomiendas para lograr un abdomen más chato?


Fuente: Yahoo

lunes, 21 de octubre de 2013

¿ODIAS HACER EJERCICIO? 10 CONSEJOS PARA QUE CAMBIES DE IDEA

Dicen que del amor al odio no hay más que un paso (y viceversa), y es muy posible que ese primer paso sea el que necesitas dar para transformar tu rechazo en algo positivo Si el solo hecho de pensar en el gimnasio te causa un dolor de cabeza, sigue leyendo este artículo y descubre cómo hacer para cambiar de idea y de estilo de vida.

Admítelo. A pesar de que has leído y escuchado cientos de veces todas las ventajas que brinda la actividad física, aun así sigues odiando hacer ejercicio y no toleras la idea de ir al gimnasio ni siquiera una vez por semana. Claro que te gustaría estar en forma, pero la tentación de permanecer cómoda(o) en casa o salir a comer con amigos es mucho mayor… ¿Qué puedes hacer? Considera los




siguientes consejos:
1.      
      Regla número uno: recuerda que nada es imposible y que el cambio depende de ti. Lo primero que debes hacer es creer que sí puedes cambiar esa sensación de rechazo frente al ejercicio. Nada sucederá si no cambias primero tu actitud. Luego, hay varias claves que pueden ayudarte a establecer una rutina de ejercicios que sí puedas mantener.

2.      Analiza las razones que te hacen rechazar el ejercicio: ¿te da vergüenza como luce tu cuerpo, no te gusta transpirar frente a los demás, no tienes tiempo, te falta la ropa apropiada, necesitas un compañero de rutina, te resulta muy costoso tener acceso a un gimnasio o sientes que en experiencias anteriores no has visto demasiados resultados luego de tu esfuerzo? Estos son algunos de los factores que suelen quitarle la motivación a las personas y hacen que seleccionen la vida sedentaria “por eliminación” o, simplemente, porque no es fácil ir en contra del ritmo de vida que llevamos. Una vez que identifiques las razones que te mantienen pegado(a) al sofá, será mucho más fácil combatirlas.

3.      Busca la fuerza en la motivación: sentirte con más energías, combatir el sobrepeso, lucir más juvenil. Para mantenerla viva es muy importante que no te aburras haciendo ejercicio. Prueba distintos tipos de ejercicio, incluso un deporte que nunca has practicado, hasta que encuentres el que te motive y te proporcione más bienestar y alegría.

4.      El gimnasio no es el único lugar donde puedes poner tu cuerpo en movimiento. También puedes tomar clases de danza, salir a caminar o a correr con amigos, andar en bicicleta por tu barrio o ¿porque no?, hacer ejercicios más pausados como los de yoga o Pilates (dos buenas opciones si no te gusta sudar demasiado).
5.      Otra excusa muy común para posponer los ejercicios es la escasez de tiempo. Si ese es tu problema, elige el momento del día más apropiado para ejercitarte. Algunos especialistas consideran que es mejor por la mañana, antes de comenzar con el resto de las actividades, pero hay personas que prefieren hacerlo por la tarde o al anochecer, luego de un arduo día de trabajo y cuando ya comienza a bajar el sol.

6.      No te dejes sabotear por la idea errónea de “o todo o nada”. Si un día no puedes hacer ejercicio todo el tiempo que tenías planeado (digamos una hora), no hay razón para descorazonarte.  Puedes hacer ejercicio en media hora y hasta cortarlo en recreos de 10 o 15 minutos por vez, que bien puedes intercalar con otras actividades, ya sea en casa o en el trabajo. Lo importante es perseverar.

7.      Busca alternativas. Puedes aprovechar cada momento de la vida cotidiana para moverte más: subir por las escaleras en vez de tomar el ascensor, caminar a lugares cercanos en lugar de ir en auto, y hasta dedicarte a la jardinería pueden ser de gran ayuda.

8.      Si el problema es económico, recuerda que el gimnasio no es la única alternativa ni tienes que tomar clases que se salgan de tu presupuesto necesariamente. En cambio, puedes buscar actividades en grupo en tu barrio o aprovechar los momentos de la vida cotidiana que te mencionábamos antes. Incluso puedes seguir un video de ejercicios en la tranquilidad y privacidad de tu propio hogar. No son caros y viene en todos los niveles (desde principiante hasta avanzado), y en tantas variedades que seguramente encontrarás uno que se ajuste a tus gustos y necesidades.

9.      Y si lo que necesitas es compañía, busca un amigo o familiar que te acompañe. Incluso, puedes llevar a tus hijos y mientras ellos hacen algún deporte que les guste, tú puedes aprovechar para hacer lo tuyo. Por ejemplo: si ellos van a natación, puedes caminar o trotar alrededor de la pileta, lo mismo si van a jugar al futbol. Otra buena idea es ir juntos a jugar al parque, algo que además los ayudará a estar más unidos.

1-   Por último, recuerda ser paciente. Los resultados no se ven de un día para otro, pero si eres constante, en el momento menos pensado te sorprenderás tu mismo(a). Y mientras tanto, por supuesto, no dejes de premiarte por tu esfuerzo y por tus logros.


Fuente: Vida y Salud

DIEZ CONSEJOS PARA CONSEGUIR UNA BUENA SALUD

Todos queremos tener una salud de acero y conseguir mejorar nuestro estado general. Después de años buscando una fórmula para saber qué hacer a la hora de tener una buena salud he llegado a la conclusión de que puedo unir los puntos más importantes a tener en cuenta en diez consejos que no debemos pasar por alto. En esta ocasión os quiero hacer partícipes de una experiencia que a todos nos compete, y es saber qué debemos hacer para estar en forma y conseguir una buena salud.


Practicar deporte
Como primer punto he decidido destacar la realización de deporte. El deporte es una de las mejores maneras de mantenernos jóvenes y en perfectas condiciones, ya que ayuda a nuestro organismo a estar activo y a nuestros músculos a mantenerse tonificados y fuertes. A la hora de hacer deporte es necesario ser constantes y realizar por lo menos tres sesiones por semana, sea de la actividad que sea, ya que lo ideal es variar y evitar acostumbrarnos a una misma actividad. Personalmente considero que la variedad es esencial a la hora de hacer deporte, ya que además de no cansarnos nosotros conseguiremos mejores resultados pues nuestro cuerpo siempre deberá enfrentarse a un nuevo reto.

Respetar el descanso
El descanso es el segundo punto que vamos a tener en cuenta, y es que es importante que durmamos entre siete u ocho horas diarias para que nuestro organismo esté en perfectas condiciones. El descanso es esencial para recuperar nuestros músculos después del entrenamiento y la actividad cotidiana. No hay que olvidar que el sueño también nos ayudará a conseguir una mejor oxigenación y estado de la piel, así como un mejor funcionamiento general de todos los órganos de  nuestro cuerpo.

Mantener una alimentación variada
En tercer lugar me voy a detener en la alimentación, que debe ser variada. Seguir una dieta en la que estén presentes diferentes tipos de alimentos es esencial para conseguir una buena salud. Nuestro organismo está preparado para asimilar todo tipo de alimentos y todos estos alimentos nos aportarán una serie de nutrientes necesarios para conseguir una buena salud. Por ello es necesario que echemos mano de todo tipo de alimentos. El consejo que os doy es adquirir la dieta mediterránea como ejemplo, pues admite una alimentación variada y equilibrada.

Cuidado con las grasas saturadas
Dejar de lado las grasas saturadas y su abuso es otro consejo que os voy a dar. Es importante que ingiramos grasas, ya que nuestro cuerpo las necesita para poder vivir, pero es importante que sepamos qué tipos de grasas son las adecuadas para mantener una buena salud. Debemos decantarnos por las grasas mono insaturadas y por las poliinsaturadas que  nuestro cuerpo aprovechará al máximo y las cuales nos ayudarán a mantenernos en perfecto estado.

Realizar cinco comidas
No saltarnos ninguna comida es esencial para estar en plena forma. Pasar hambre es lo peor que podemos hacer a la hora de mantenernos sanos. Es necesario mantener un control de las horas de la comida y respetarlo. Realizar cinco comidas ligeras al día es lo adecuado. Un consejo que os voy a dar es pensar en la cantidad de comida que consumimos al día y dividirla en cinco comidas, es decir, no hay que comer más cantidad por tener más horas de comida, sino comer lo mismo, pero más repartido para conseguir controlar el hambre y mantener mejor la línea.

Ingerir frutas y verduras
Incluir en la dieta frutas y verduras es esencial para mantenernos en plena forma. Las frutas nos aportarán vitaminas y minerales necesarios para el correcto funcionamiento del cuerpo. Un punto a tener en cuenta sobre las frutas y verduras es su alto contenido en fibra, que nos ayudará a depurar nuestro organismo.

Evitar el estrés
Relajarnos y evitar las situaciones de estrés a diario nos ayudará a tener una mejor salud. Considero que es necesario tener actividades que nos ayuden a evadirnos de la rutina cotidiana. Sesiones de relajación, yoga, hobbies, deporte… Cualquier actividad que nos relaje es muy recomendable para estar en perfectas condiciones.

Hidratarnos de manera adecuada
Como octavo consejo voy a destacar algo que nunca podemos pasar por alto, y es una correcta hidratación. Gran parte de la composición de nuestro cuerpo son los líquidos. El agua es fundamental para la vida, y como tal debemos dotar a nuestro organismo de las cantidades que necesita. Por ello es necesario ingerir una media de dos litros de líquidos por día para mantener una correcta salud en todos y cada uno de los órganos de nuestro cuerpo.

Evitar el alcohol y el tabaco
Ni que decir tiene que es necesario evitar excesos en nuestra vida y vicios como el alcohol y el tabaco que empeorarán nuestra salud a diferentes niveles, además de acelerar el proceso de envejecimiento natural del cuerpo humano. Controlar esto es fundamental a la hora de lograr mantener  una correcta salud. Simplemente os recomiendo cambiar el chip y sopesar lo que nos aportan estos vicios con lo que nos supone a nivel de salud.

Planificación y control de los hábitos
Como último consejo os voy a recomendar un punto muy importante que es la planificación y el control a la hora de mantener unos buenos hábitos. Establecer un horario de comidas, otro con el control de las comidas y platos a preparar  para conservar la variedad en nuestras comidas, así como otro horario para entrenar y practicar deporte. Este simple gesto es una de las mejores maneras de conseguir los objetivos que nos hemos propuesto y mantener un control total de lo que estamos haciendo.




Fuente: 1001 experiencias

LOS NIÑOS Y LA COMIDA: 10 CONSEJOS PARA PADRES

No es de extrañar que los padres necesiten ayuda para entender qué significa comer de forma saludable. Desde la pirámide de los alimentos hasta la última grasa alimenticia, el alud de información existente sobre este tema puede desorientar bastante. La buena noticia es que usted no necesita graduarse en nutrición para criar hijos sanos. Siguiendo algunos recomendaciones básicas, usted puede crear un entorno doméstico que fomente la alimentación saludable y el mantenimiento de un peso saludable.





He aquí 10 normas básicas a seguir:

1.- Los padres son quienes controlan las líneas de abastecimiento. Son ustedes quienes deciden qué alimentos se compran en su casa y cuándo se sirven. Aunque es de esperar que los niños den la lata a sus padres para que les dejen comer alimentos menos nutritivos, son los adultos quienes deciden qué alimentos entran en casa. Los niños no se quedarán con hambre porque en su casa no hay lo que más les apetece comer. Comerán lo que haya en los armarios y la nevera. Si el tentempié favorito de su hijo no tiene nada de nutritivo, aún y todo, usted puede comprárselo de vez en cuando para que no se atiborre de ese alimento en cuanto caiga en sus manos.

2.- De los alimentos que ofrezca a su hijo, déjele elegir lo que quiere comer o si quiere comer. Los niños también deben tener voz y voto en el asunto. De la selección de alimentos que ofrezca a su hijo, déjele elegir lo que quiera comer y la cantidad que quiera comer. Tal vez le parezca que esto es darle demasiada libertad. Pero, si usted sigue la primera recomendación de esta lista, su hijo solamente podrá elegir entre los alimentos saludables que usted ha decidido comprar y preparar.

3.- Olvídese de la máxima de "dejar el plato limpio". Permita que su hijo acabe de comer cuando sacie su apetito. Muchas de las personas que ahora son padres se educaron con la máxima del plato limpio, pero este enfoque no ayuda a los niños a escuchar a su cuerpo para saber cuándo han comido suficiente. Si un niño aprende a reconocer la sensación de saciedad y a reaccionar en consonancia, es menos probable que coma más de lo que debería.

4.- Empiece pronto. Las preferencias alimentarias se adquieren muy pronto en la vida, de modo que empiece pronto a ofrecerle a su hijo un amplio abanico de alimentos. Los gustos y los desagrados relacionados con la alimentación se empiezan a desarrollar durante la lactancia. Así mismo, es posible que necesite darle a probar un alimento nuevo a su hijo en varias ocasiones antes de que lo acepte. No le fuerce a comer, limítese a ofrecerle unos pocos bocados del alimento que desea introducir en su dieta.

5.- Reescriba el menú infantil típico. Cuando salgan a comer fuera de casa, deje que su hijo pruebe platos nuevos. Tal vez le sorprenda su deseo de experimentar. Puede empezar dejándole probar un poquito de lo que ha pedido usted o pidiendo una tapita o ración reducida para que la pruebe.

6.- Las calorías de las bebidas también cuentan. Los refrescos con gas y otras bebidas edulcoradas suman calorías y se interponen en el camino de la alimentación saludable. El agua y la leche son las mejores bebidas para los niños. El zumo está bien cuando es al 100%, aunque los niños no necesitan beber mucho zumo. Con 115 a 170 ml diarios -de 4 a 6 onzas- basta para un preescolar.

7.- Ponga los dulces en su sitio. Está bien tomar dulces de vez en cuando, pero no convierta el postre en el plato más deseado de las comidas. Cuando el postre se convierte en el premio por haberse comido bien la cena, es normal que los niños den más valor al pastelito que al brócoli. Intente mantener una actitud neutra hacia los alimentos.

8.- No confunda la comida con el cariño Encuentre formas mejores de decir "Te quiero". Cuando se utiliza la comida para recompensar a los niños y/o para mostrarles afecto, los niños pueden empezar a utilizarla como mecanismo para afrontar el estrés u otras emociones negativas. En vez de recompensar a su hijo con sus manjares preferidos, abrácelo, elógielo y préstele atención.

9.- Los niños hacen los que hacen sus padres. Sea un buen ejemplo para su hijo comiendo de forma 
saludable. La mejor forma de enseñar buenos hábitos alimentarios a su hijo es comiendo bien. Tome tentempiés nutritivos, coma en la mesa y no se salte comidas.

10.- Limite el tiempo de televisión y ordenador. De este modo, evitará que su hijo pique mecánicamente mientras está delante de una pantalla y fomentará en él la actividad física. Las investigaciones han demostrado que los niños que reducen las horas de televisión también reducen su porcentaje de grasa corporal. Cuando se les limita el tiempo de televisión y ordenador, los niños encuentran formas más activas de pasar el tiempo. Y, si la familia al completo limita el tiempo que pasan delate de cualquier tipo de pantalla, tendrán más tiempo para estar activos juntos.



Fuente: Kids Health

lunes, 14 de octubre de 2013

LA OSTEOPOROSIS Y SU PREVENCIÓN

La osteoporosis es una enfermedad caracterizada por la reducción asintomática de la masa ósea. Cuando esto ocurre, es decir, cuando la masa ósea disminuye, se resiente la estructura del hueso; no hay más apoyo mecánico y ocurren fracturas con traumas mínimos.
Esta enfermedad aparece con mayor frecuencia en mujeres posmenopáusicas y en personas de tercera edad de ambos sexos.

Carencia de calcio
Los estudios efectuados sobre animales demostraron que las dietas pobres en calcio o altas en fósforo producen disminución generalizada de la masa ósea.
Por otro lado, es recomendable ingerir 800 mg de Calcio por día en mujeres de 25 a 45 años de edad (ver tabla), y se pueden requerir hasta 1200 mg./día entre los 10 y 25 años para lograr el pico de masa ósea. Estas cantidades se pueden alcanzar con dietas apropiadas, que permitirán prevenir la osteoporosis a través de una correcta alimentación.

Los factores de riesgo, conocidos también como factores decalcificantes, que existen y que se deben tener en cuenta porque no permiten la correcta asimilación o utilización del calcio en el organismo son:
El consumo de alcohol
El consumo exagerado de proteínas
Los suplementos de Zinc
El ácido oxálico / ácido fítico
Consumo exagerado de fibras
Ingerir sal en exceso
La cafeína
El consumo de tabaco
El sedentarismo

Las alternativas para un aporte apropiado de calcio en la dieta cotidiana y que por ello no implique un consumo de calorías y grasas en exceso son:

Lácteos descremados y sus derivados. Por ser descremados, su contenido graso (y por ende calórico) es menor, sin que por ello su dosis de calcio sea menor. Por lo general ocurre que su contenido de calcio es igual o mayor.

Los pescados (sardinas con su esqueleto), las frutas secas, las legumbres y el bróccoli son fuentes importantes de calcio.

Agregar quesos descremados (blancos untables o quesos blandos) a ensaladas, vegetales al vapor, sopas, purés, emparedades, etc,

Utilizar leche descremada como medio de cocción de harinas de maíz, arroces, pescados al horno, salsas blancas, sopas, etc.

Las 10 sugerencias para prevenir la osteoporosis:
Ingerir suficiente calcio con una dieta balanceada
Ingerir suficiente vitamina D
No realizar "dietas de hambre"
Hacer ejercicio periodicamente
No fumar
Controlar la ingesta de cafeína, el exceso de sal, proteínas y fósforo
No ingerir alimentos con fibras vegetales en exceso
Limitar el consumo de bebidas cola
Moderar el consumo de alcohol
Evitar medicamentos que disminuyan la masa ósea


Fuente: Zona Diet

AUMENTAN LOS CASOS DE MELANOMA ENTRE LOS ADOLESCENTES

El cáncer de piel más grave de todos, conocido como melanoma, está aumentando en el mundo entero. Paradójicamente, su incidencia más alta en los adolescentes en Estados Unidos se ha presentado en lugares donde los rayos ultravioleta (UV) son bajos. La culpa de este aumento se debe, parece ser, al uso de camas bronceadoras y otros métodos artificiales que usan este tipo de rayos.

Durante la adolescencia, los jóvenes piensan que van a vivir para siempre, o sea, que no son mortales. También tienen una necesidad muy fuerte de verse guapos y atraer al sexo opuesto. Piensan que estar bronceados(as) los hará llamar la atención. Por eso, ya sea que vivan en una ciudad de playa o en ciudades frías e invernales, harán lo que sea para lograr una piel canela.

Sin embargo, exponerse al sol tiene sus riesgos, al igual que abusar de los métodos para lograr un bronceado artificial con camas y lámparas que irradian rayos ultravioleta (UV). De ahí, tal vez, que exista ahora un aumento significativo del melanoma entre los adolescentes, especialmente en las mujeres jóvenes.
El melanoma es el cáncer de la piel más agresivo de todos, y se desarrolla en los melanocitos, o las células que producen el pigmento de la piel. Este tipo de cáncer en la piel puede formarse también en los ojos, las uñas y en raras ocasiones, incluso en los órganos internos como los intestinos.

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, cada año a nivel mundial entre 2 a 3 millones de personas se ven afectadas con diferentes tipos de cáncer de la piel (que incluyen 132,000 casos de melanomas y otros que no son melanomas). De acuerdo a las estadísticas de la Fundación del Cáncer de la Piel, uno de cada tres cánceres que se diagnostican es un cáncer de la piel y entre los estadounidenses, uno de cada 5, desarrollará un cáncer en la piel en el transcurso de su vida.

Cada año, desde 1970, el riesgo del melanoma en los adolescentes ha aumentado en un 2% en ambos sexos. Las razones no son claras del todo. Durante el período comprendido entre 1973 y 2009, unos epidemiólogos del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, identificaron 1,317 casos de melanoma en pacientes menores de 19 años. La mayoría de los afectados, son adolescentes con piel blanca –un total de 1,230.

Llama la atención que el melanoma es casi dos veces más frecuente en las chicas que en los chicos. 61% de los casos se presentaron en ellas, y 39% en ellos. Además, este análisis descubrió que el riesgo del melanoma aumenta con la edad. La mayoría de los casos analizados se presentaron en los adolescentes entre los 15 y los 19 años de edad, y sólo el 8% se presentó en los niños menores de 9 años.

En el caso de los chicos adolescentes, los casos de melanoma se presentaron en áreas del cuerpo como la cara y el tronco, mientras que en las chicas adolescentes, la mayoría de los casos fueron en las piernas y las caderas.  Si bien estas áreas se exponen al sol, el estudio encontró que la exposición al sol no fue el factor principal que causó este tipo de cáncer. Se observó que el mayor número de casos de melanoma se presentó en áreas geográficas con baja exposición a los rayos UV y no tanto en las áreas de mayor exposición como California o Hawaii.

Por esta razón, la investigación sugiere que el aumento de casos de melanoma puede deberse a que hay muchos más lugares que ofrecen bronceado artificial. Además, esto explicaría por qué en las chicas adolescentes ha habido más casos, pues ellas son más propensas a visitar los lugares con camas bronceadoras que los chicos. También es probable que la razón por la cual se han diagnosticado más casos es que existe una mayor consciencia sobre el melanoma.

Estar atentos a los síntomas del cáncer de la piel más agresivo de todos, es muy importante. Por eso, mantente alerta si notas cualquier cambio en un lunar existente o si desarrollas un nuevo pigmento o abultamiento en tu piel.

No está de más recordarte que lo que más aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de la piel es abusar del sol, especialmente, si no se usa protección solar. Así que si adoras la playa y/o la piscina o pasas mucho tiempo al aire libre, siempre protege tu piel con un protector que contenga un factor de protección solar de 15 o más, usa sobreros y ropa que cubra tu piel.

Si notas cualquier anormalidad en tu piel consulta con tu médico (idealmente un dermatólogo), pues más vale detectarlo temprano. Si se encuentra un melanoma, frecuentemente una cirugía para removerlo es suficiente, pero si se ha diseminado a otras partes del cuerpo (metástasis) el tratamiento podría incluir quimioterapia o radiación.


Por eso, es mejor prevenir que curar. No pienses que porque eres joven, eres inmune al cáncer de la piel (incluido el melanoma). ¡Protégete!

Fuente: Vida y Salud

miércoles, 9 de octubre de 2013

EN CUESTIÓN DE ALIMENTOS, ES MEJOR PRECAVER: 8 CONSEJOS PARA GANAR EN SALUD

¿Cuáles alimentos  te convienen y cuáles perjudican tu salud? ¿Cómo deben manipularse y cocinarse para que no te hagan daño? A veces las informaciones que recibes son confusas, y la mejor forma de tener la seguridad de que lo que comes es saludable es seguir las recomendaciones de los expertos.
Se dice que “somos lo que comemos”. Y es verdad. La calidad de nuestra vida y de nuestra salud depende de una buena alimentación. Esta, a su vez, va de la mano de no sólo de la selección apropiada sino además de la preparación adecuada de los alimentos que servimos y consumimos a diario. Estos consejos te enseñarán muchas cosas importantes sobre los alimentos, tomando como base la frase tan sabia que dice: es mejor precaver que lamentar.

1. Usa el termómetro  de cocina.
Muchas personas cocinan “al ojo”.  Si ya está dorado por fuera o lleva tantos minutos al fuego, piensan que ya está listo.  Sin embargo, Tina Hanes, enfermera y dietista del U.S. Department  of Agriculture Food Safety and Inspection Service, afirma que el color y la textura de un alimento no son elementos de los cuales podemos confiar para saber si está bien cocido. ¡Usa el termómetro al cocinar para estar bien seguro(a)!
Cocina la carne de res, de cerdo y de cordero a un mínimo de 145° F (unos 63° C), y deja que reposen tres minutos cuando la saques del horno. Las aves a 165° F (unos 74° C), y la carne molida a 160° F (unos 70° C). Para tomar la temperatura de las pechugas de pollo y las hamburguesas, inserta el termómetro en el lado de la parte más gruesa.

2. Los carbohidratos y el gluten no son siempre enemigos.
Está de moda pensar que los carbohidratos no son sanos (pero lo que se debe evitar son los azúcares refinados) y que se debe evitar el gluten. El gluten es una proteína del trigo, que únicamente afecta a las personas que padecen de enfermedad celiaca, una condición en la que se tiene intolerancia al gluten porque se tiene incapacidad para procesarlo. Sólo las personas que la padecen deben suprimir el gluten, pero según Amy Frasieur, dietista de Bastyr University, en San Diego, California, los que no la sufren ni tienen alergia el gluten pueden consumirlo sin problemas.
En cuanto a los carbohidratos, si los evitas en exceso te privas de nutrientes vitales y de una excelente fuente de energía. No los saques de tu dieta. Es mejor seleccionar los carbohidratos de calidad: frutas y vegetales frescos, así como los cereales y granos integrales (fríjoles (habichuelas o porotos), arvejas (guisantes o chícharos) y frutos secos. ¿Y por qué no pruebas algunas de las recetas nutritivas y bajas en calorías que tenemos en Vida y Salud? Encontrarás mil formas de incluir alimentos sanos y nutritivos en tus menús. No te dejes llevar por la rutina ¡y explora!

3.  Si se cae ¡no lo recojas!
¿Se cayó un alimento al piso? Deséchalo ¡enseguida! No creas que porque estuvo sólo unos segundos en el piso puedes comerlo sin temor. No es cierto. Según Frasieur, las bacterias se adhieren instantáneamente al alimento, y puede enfermarte.

4. Separa y ganarás en salud.
Ya lo sabes: las carnes crudas no deben mezclarse con las verduras y los alimentos que se comen crudos. Debes tener una tabla de cortar para cada cosa.
Pero hay más: la meseta de cocina y la mesa también se contaminan. Dice Cheryl Luptowski, de NSF International, una organización independiente sin fines de lucro. Ella recomienda que no pongas nada sobre mesetas ni mesas de comer, incluyendo bolsos y maletines de escuela. Si usas bolsas reusables de tela para colocar los alimentos en el supermercado, no envases juntas las carnes y las verduras. ¡Y no te olvides lavarlas!

5. Ojo con los vegetales y las frutas.
Los alimentos orgánicos cuestan más, y los estudios arrojan resultados mixtos sobre si su valor nutritivo es mayor. Pero, según Frasiuer, sí tienen un beneficio definitivo para la salud: menos exposición a los pesticidas y los aditivos, lo que resulta en alimentos más sanos.
¿Es seguro comer sin lavar los vegetales pre empacados? Hanes, del U.S. Department  of Agriculture’s Food Safety and Inspection Service, dice que si las bolsas tienen la etiqueta “Listos para comer”, o “Prelavados”,  puedes comerlos sin lavar.

6. ¿Por cuánto tiempo se conservan?
Cuando hagas la compra, no dejes los alimentos en un auto o a la intemperie mucho tiempo (en el verano, no más de una hora). Si vas a hacer varias diligencias, deja el supermercado para el final.
¿Y si se va la electricidad? En el refrigerador (hielera) cerrado, los alimentos se mantienen en buen estado unas cuatro horas. Según Hanes, en el congelador lleno hasta la mitad se mantienen congelados 24 horas; en el congelador lleno, hasta 48 horas.

7. Cuidado con las bebidas energéticas.
Contienen dosis altas de cafeína y otros estimulantes. “Las dosis altas de cafeína pueden tener efectos perjudiciales”, dice Frasieur. “Y no se sabe con certeza el impacto de combinar la cafeína con los otros estimulantes que también contienen estas bebidas”. Los niños, las mujeres embarazadas y los hipertensos deben evitarlas definitivamente. Y el resto de las personas, podrían consumirlas con mucha moderación: considera que también pueden perjudicar la salud de tu boca.  En ningún caso se deben combinar con bebidas alcohólicas.

8. Limpia y esteriliza.
¿Usas las esponjas de cocina para diferentes tareas? Luptowski recomienda que no lo hagas (debido a que se vuelven un criadero de gérmenes). Prolóngales la vida a las esponjas de cocina: mójalas y ponlas en el microondas por dos minutos para destruir los gérmenes. Y nunca uses las esponjas de fregar los platos para fregar también los platos de tus mascotas.
Si  preparas un alimento que puede transmitir bacterias, como la carne cruda, Luptowsky aconseja que conectes la lavadora de platos en el ciclo de esterilizar. Si no tienes lavadora, esteriliza los utensilios: lávalos con agua caliente y jabón, ponlos después en un recipiente con un galón de agua caliente y un chorrito de cloro y enjuágalos bien.

Si mantienes una buena higiene en tu cocina y conviertes estas recomendaciones en hábitos, le ofrecerás a tu familia una alimentación más sana, libre de bacterias y de contaminación, lo que es sin duda una de las bases de la buena salud.

Fuente: Vida y Salud